Apophénies, interruptions. Artistes et intelligences artificielles au travail

La exposición arroja luz sobre algunas de las implicaciones de la inteligencia artificial, al tiempo que se centra en el papel de la inteligencia y la intervención humanas en el desarrollo y la articulación de los procesos creativos, llegando incluso a modificar los propios sistemas de producción de la IA. Reflexiones sobre la memoria colectiva tal y como figura catalogada en los archivos nacionales, investigaciones experimentales sobre el fin de las grandes narrativas, proyecciones futuras de obras de arte no realizadas, experiencias íntimas o las convulsiones de la historia colonial... temas que emergen en las obras presentadas, todas ellas revestidas de una lúcida curiosidad, y que ponen a prueba el modo en que estas nuevas tecnologías están transformando nuestro mundo.
 
Aunque la IA generativa promete transformar la investigación artística y ofrecer nuevas herramientas creativas, también está teniendo un profundo impacto en la forma en que ahora nos vemos abocados a contemplar las obras de arte. El término «apofenia», acuñado en 1958 para diagnosticar la esquizofrenia, se refiere a un trastorno cognitivo que consiste en percibir vínculos significativos entre elementos dispares que a priori no están relacionados. Este fenómeno puede compararse con los errores de continuidad que se cometen en los procesos de reconocimiento de patrones que constituyen el núcleo de la inteligencia artificial generativa. Estos procesos, tensados entre la eficacia algorítmica y los fallos que interrumpen su coherencia, se consideran aquí el punto de partida prometedor para la investigación artística.
 
Con la IA generativa, las redes neuronales trascienden el análisis de la información; se convierten en creadoras en el sentido de que generan nuevas imágenes y textos sintetizados a partir de conjuntos ingentes de datos extraídos de Internet. Sin embargo, como en el caso de la apofenia, con frecuencia se producen distorsiones y sesgos que dan lugar a contenidos incorrectos conocidos como "alucinaciones".
 
Estas imprecisiones son motivo de preocupación, aunque se mitiguen con la intervención humana en los procesos de formación, filtrado y etiquetado. Y, sin embargo, estos modelos ya son utilizados a diario por millones de personas. Es la propia característica del acceso masivo a la IA lo que hace que este momento sea tan transformador, lo que consecuentemente invita a los artistas a exploraciones críticas. El objetivo no es solo reflexionar sobre las posibles consecuencias de estas nuevas tecnologías, sino también comprender cómo están empezando a cambiar y a dar forma a nuestro mundo social.