Artista/ponente
Charlotte Perriand
Créateur d'objets, Créateur de mobilier

Charlotte Perriand
Créateur d'objets, Créateur de mobilier
Nationalité française
Nacimiento: 1903, Paris (France)
Defunción: 1999, Paris (France)
© Adagp, Paris
Biografía
Como figura principal de la historia de la modernidad, Charlotte Perriand dejó su impronta en la historia del diseño por su personalidad, su libertad y su curiosidad por el mundo. Sus investigaciones, centradas principalmente en el mobiliario, así como en la arquitectura, el urbanismo, la fotografía y el arte, pretendían poner el progreso industrial y técnico al servicio del mayor número posible de personas. Aunque esta arquitecta y diseñadora es famosa por sus colaboraciones con Le Corbusier o los talleres de Jean Prouvé, en 2005 el Centre Pompidou organizó una gran exposición retrospectiva que dio a conocer al público aspectos menos conocidos de su obra. Sus compromisos políticos contribuyeron, en particular, a definir un nuevo estilo de vida, accesible para las clases medias, demostrando que «lo importante no es el objeto, sino la persona».
Charlotte Perriand nació en París en 1903 en el seno de una familia de diseñadores de moda. Tras pasar una temporada en la campiña de Borgoña con un familiar, donde desarrolló su relación con el espacio y la naturaleza, regresó a París para vivir con sus padres y estudió en la Union Centrale des Arts Décoratifs entre 1920 y 1925. Allí se interesó por nuevos materiales como el metal, rompiendo con la tradición. En 1927, tras su aclamada participación en el Salón de Otoño con su Bar bajo el techo, se asoció con Le Corbusier y Pierre Jeanneret. Con ellos fundó la Union des Artistes Modernes (UAM) en 1929. La sencillez, la funcionalidad y la modularidad se convirtieron en señas de identidad de su estilo y dieron lugar a famosas piezas de mobiliario como el Fauteuil Grand Confort (Sillón Grand Confort) o el Fauteuil B 301 (Sillón B 301).
En los años 1930, trabajó en grandes proyectos como el equipamiento de la Cité-refuge de l'Armée du salut y del Pavillon suisse de la Cité universitaire. La artista era simpatizante del partido Comunista, y no ocultó la dimensión política de sus reflexiones sobre la arquitectura, en particular a través de la Maison du Jeune Homme (Casa del joven) (1935), un espacio reducido para un joven soltero equipado con diversos equipamientos deportivos y un fresco de Fernand Léger.
En la década de 1940, su estilo se vio fuertemente influido por una larga estancia en Japón. Invitada como asesora al Instituto de Arte Industrial, allí descubrió un modo de vida, una filosofía y unos materiales que se hacían eco de sus propias investigaciones. En 1942, organizó una exposición titulada «Selección, Tradición, Creación» en la que mostró creaciones tradicionales japonesas junto a las suyas propias, incluida la transposición en bambú de la Chaise longue B 306 (Tumbona B 306). La Segunda Guerra Mundial la obligó a regresar a Europa, donde llevó a cabo numerosos programas de equipamiento colectivo en colaboración con los talleres Jean Prouvé.
Siempre fascinada por la montaña, trabajó en la creación de la estación de alta montaña de Les Arcs, en Saboya, para la que diseñó los edificios, los planos urbanísticos y el acondicionamiento interior en forma de bloques modulares, como el Bloc cuisine (Bloque de cocina) (1975) o el Bloc salle de bains (Bloque de baño) (1975). Este proyecto monumental y único es la culminación de su investigación sobre la vivienda colectiva y el diseño de interiores.